El hecho se constató aproximadamente a las 19:30 de este lunes luego de que el personal del refugio realizara un recorrido para verificar el estado de los animales, teniendo en cuenta el incendio ocurrido en un camino comunal cercano a Atingy. Las aberturas fueron realizadas en los corralones de los ñandúes y de los aguara guasú.
“Hasta ahora no sabemos qué intenciones tenía la gente que hizo esto, pero sí hicieron un daño a la propiedad de la EBY que por suerte no pasó a mayores”, comentó el doctor del Refugio Faunístico Atingy, Gregorio Maidana.
El refugio tiene una extensión de cien hectáreas, está situado en la compañía de Atingy, distante a 18 kilómetros de la localidad de Ayolas, y posee cerca de 400 ejemplares de distintas especies en cautiverio, semicautiverio y está abierto a los visitantes en forma gratuita de domingo a sábado de 08:00 a 15:00 horas.