El expresidente de la República y actual director de la Entidad Binacional Yacyretá, Nicanor Duarte Frutos, participó ayer de un conversatorio sobre “Los desafíos de un estadista en el poder”, en Encarnación.

En la oportunidad el ex mandatario habló de la importancia del rol del Estado como promotor de la justicia social y desarrollador de la equidad en sociedades con muchas desigualdades como la nuestra. Se refirió además al perfil de un estadista, de quien dijo debe ser el que logra que el Estado siga siendo el amparo y la protección de los ciudadanos y ciudadanas, sin importar su realidad social, su capital cultural y su partido político.


“Vivimos en un tiempo en que se discute el valor de la democracia y también del Estado, tiempo de incertidumbre, de temor y de esperanza”, comenzó diciendo para luego ahondar en el significado del Estado y el papel que debe desempeñar.


“El Estado es el lugar de la universalidad, porque tiene que trabajar por el bienestar general, tiene que impulsar el bien común. El Estado no puede ser el protector y amparo de intereses sectoriales. No puede privilegiar a determinados estamentos en desmedro de otros. Tiene que tener una alta sensibilidad de justicia social”, añadió.


Acotó que cuando el Estado es incapaz de resolver los conflictos de una sociedad, cuando un Gobierno no puede resolver la conflictividad en el marco de las normas democráticas republicanas civilizadoras, el Estado está fracasando y el mediador, que es el Gobierno, mucho más. Cuando no podemos resolver los intereses contrapuestos de manera civilizada queda el camino de la violencia, del más fuerte.


Agregó que el buen estadista es aquel que tiene que lograr que el Estado sea el lugar de la universalidad. No es el burócrata como se cree, ni aquel que es portador de saberes técnicos.


El estadista debe ser un hombre práctico, que conoce la conflictividad, que tiene la capacidad del diálogo, de la persuasión y de los grandes acuerdos. Tiene que hablar con la gente.


Subrayó que el estadista debe asegurar la continuidad del Estado garante del contrato social que tenemos. Pero si el estadista manipula los poderes, los tribunales y utiliza el Ejecutivo para sus grandes ganancias olvidando al pueblo, persiguiendo a los trabajadores, a los funcionarios públicos, no es estadista, es un mercenario que está en el poder, lamentablemente, por el voto del pueblo, dijo.


Insistió en que el Estado debe ser el promotor de la justicia social, de la equidad, el que debe desarrollar las políticas compensatorias en sociedades todavía penosamente desiguales como la nuestra para evitar que muchos de nuestros compatriotas permanezcan excluidos de la salud, la educación la ciencia, la tecnología.


Recordó que el artículo 1 de la Constitución Nacional dice que Paraguay es un Estado social de derecho, no un Estado mercadista, libre mercadista, sino un Estado que debe invertir mucho más en educación, democratizar la educación, no que los hijos de las familias pudientes solamente puedan llegar a las universidades; democratizar la salud, que no sea un privilegio de los que tienen plata para curarse, sino termine siendo un derecho; las viviendas populares. Debe garantizar el subsidio a los sectores trabajadores, a los productores agrícolas, a la agricultura familiar campesina.


“Podemos definir al estatista desde diferentes lugares. El estadista debe ser hombre o mujer comprometido con la gente, con los dolores ajenos, es aquel que trabaja, que logra que el contrato social que hemos firmado siga proyectando esperanza” adujo finalmente.
La actividad se llevó adelante en el Auditorio del Holding Paraná, en la ciudad de Encarnación, Itapúa, donde los asistentes tuvieron la oportunidad de evacuar consultas sobre todo lo que compete al momento político actual y sobre las obras de Yacyretá en la zona, y el legado que dejó durante su mandato como presidente de la república, entre otros.


El acceso al Conversatorio no tuvo costo y fue dirigido al público en general organizado por los sindicatos de funcionarios de Yacyretá  SITREBY-ENC, SITRENC-EBY y SIFPROY.