El acto de presentación se realizará a las 15:00 horas, en el Centro de Convenciones y Eventos OLMI, del barrio Ka´aguy Rory, de Encarnación, con la presencia de los directores de ambas márgenes de la Yacyretá, Ingeniero Miguel Fulgencio Rodríguez, y el arquitecto Oscar Thomas; de los directores de Itaipú, de Paraguay, Gustavo Codas, y de Brasil, Jorge Samek.
Experiencia brasileña
“Cultivando Yporá” fue una experiencia exitosa llevada adelante en el lado brasileño de Itaipú, y que hoy las autoridades de Yacyretá pretenden replicar en ambas márgenes del río Paraná.
Contempla 10 proyectos y 66 sub proyectos que tienen que ver con educación ambiental, gestión por cuencas, desarrollo rural sostenible, turismo ecológico y rural, producción de peces en nuestras aguas, saneamiento en la región, salud y seguridad alimentaria, monitoreo participativo y evaluación de la calidad del agua y valoración del patrimonio cultural de la región.
La elaboración de los subproyectos saldrá de la comunidad y los resultados se verán con la participación de la ciudadanía.
Este proyecto igualmente pretende involucrar a las distintas instituciones del sector público, como ser: el Instituto Forestal Nacional (Infona), Secretaría de Medio Ambiente (SEAM), gobernaciones, municipalidades, universidades, Iglesia Católica, cooperativas, ONGs, cuyos representantes integrarán el comité gestor externo.
El planeamiento estratégico es generar energía eléctrica de calidad, con responsabilidad social y ambiental, impulsando el desarrollo económico, turístico y tecnológico sustentable de Argentina y Paraguay, países involucrados en la producción de energía a través de la represa hidroeléctrica.
Cambios climáticos
La consultora del proyecto Elvira Chávez explica que “Cultivando Yporá” es una estrategia que la EBY adopta para dar una contribución local a la lucha contra los cambios climáticos y demás desequilibrios ambientales que vienen siendo provocados por el hombre.
La profesional sostiene que el manejo inadecuado de los suelos, ligado a los monocultivos y otras prácticas inadecuadas han llevado al uso cada vez más frecuente de fertilizantes y agroquímicos, a lo que se suma la expansión de la infraestructura de los municipios, sin un eficiente manejo de efluentes urbanos y la construcción de caminos vecinales que han incrementado la erosión y la contaminación.