El avance en la liberación de áreas comprendidas dentro de la afectación del embalse del río Paraná y las obras de terminación de la represa permitió, en los últimos meses, un nuevo impulso a los frentes de trabajo principalmente del tratamiento costero de Encarnación.

El despeje de la zona de obras permitirá que los trabajos se realicen sin otros causales de atraso más que el clima, explicó el Ing. Silvio Quiñones, responsable del sector.

Los dos paquetes, A y B, ejecutados por consorcios de empresas paraguayas tienen un avance global del 52% y el desarrollo podrá ser sostenido, mediante la disponibilidad de maquinarias y personal, para la ejecución de los trabajos, sostuvo el funcionario.

“Creo que el empresariado paraguayo, es la primera vez en la historia, que tiene el volumen de obras de esta naturaleza, y es un interesante desafío por cumplir, tanto por la ingeniería paraguaya, como por las empresas paraguayas”, dijo Quiñones, al tiempo de manifestar su confianza en que el cronograma de obras se cumplirá sin mayores retrasos hasta su culminación.

La ejecución de esta obra demanda, actualmente, unos 1.200 puestos de trabajo en forma directa, mientras que de modo indirecto unas 3.000 personas están involucradas en la zona de obras, que comprende la ciudad de Encarnación.

Una muestra del gran flujo de trabajo es que 160 camiones, de gran porte, utilizados para el transporte de tierra para el relleno, operan desde las 05:00 hasta las 22:00 horas aproximadamente, de lunes a sábado, e inclusive los domingos.

De esta manera la zona costera va tomando una nueva perspectiva, con un nuevo concepto urbanístico de la ciudad y retomando una relación más estrecha con su río.

Foto: Incesante movimiento de maquinarias registra la zona costera de Encarnación.