altLa comunidad terapéutica “Fazenda La Esperanza” ubicada en el distrito de Cambyretá, y que se dedica a la recuperación de personas, de sexo femenino, con problemas de adicción, es apoyada por la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), en la construcción de la infraestructura edilicia.

El proyecto abarca la construcción de dos casas para las recuperadas, otra para las hermanas de la congregación “Familia de la esperanza” y otra para las coordinadoras responsables de la convivencia diaria; además de un salón multiuso y una cocina taller totalmente equipada.


“Hemos venido a acompañar estas obras, e interiorizarnos más en detalles sobre lo que se está haciendo y las proyecciones que tiene esta gente, en este lugar. Desde la EBY queremos seguir apoyando este emprendimiento, para que pueda cumplir con su función importantísima dentro de la sociedad”, manifestó Pablino Cáceres, jefe de Coordinación Social.

Para el sustento diario, la comunidad recibe donaciones de personas de bien, como así también, de entidades y organizaciones, nacionales e internacionales. Además las internas realizan trabajos de manualidades como bordados, impresión sobre remeras;  elaboración de panes y dulces para la venta.

El tratamiento para la recuperación tiene un proceso que dura aproximadamente un año, siendo los primeros 3 meses de desintoxicación, tiempo durante el cual, las internas no tienen contacto con nadie, ni aún con sus familiares.

Una de las coordinadoras manifestó que la acción terapéutica, para que las pacientes cambien de vida, se apoya en un trípode, y son la espiritualidad, la convivencia y el trabajo; se les presenta un nuevo estilo de vida basada en la palabra de Dios, donde se hace una invitación para recomenzar, perdonar, amar al otro, ver a Jesús en el otro.

Cuentan las encargadas que, generalmente las mujeres llegan muy debilitadas, con pérdidas de valores, de carácter, de personalidad, y en la fazenda se les ayuda “nacer de nuevo”, a tener una visión renovada sobre la vida, que les ayuda volver a la sociedad para seguir conviviendo con su familia, su pareja, sus hijos.

Finalmente cabe acotar que existen 57 “Fazenda” distribuidas por todo el mundo, tanto para varones, como para mujeres, en Brasil, Argentina, Colombia, México, Guatemala, Uruguay y por supuesto en Paraguay; y otros tantos en Europa, África y Asia.

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